Ha pasado ya medio siglo desde que en los largos años 1960 ―que discurrieron entre 1957 y 1973― se produjo una intensa confluencia entre la arquitectura y la participación ciudadana. Por aquellos años la participación se convirtió en un refugio para muchos arquitectos ―John Turner, Christopher Alexander, Ralph Erskine, Aldo Van Eyck, Lucien Kroll― que buscaban nuevos caminos más allá de las directrices emanadas de los Congresos Internacionales de Arquitectura Moderna ―al menos hasta el CIAM XI en 1959 en Otterlo, Holanda. Aquella participación, que contaba con muy buenas intenciones, buenas ideas y con un sólido soporte teórico, carecía sin embargo de herramientas metodológicas y apenas contaba con medios y mucho menos con experiencias contrastadas. De aquellos años nos quedan teorías ―como los Soportes de Habraken o el lenguaje de Patrones de Alexander―, nos quedan libros, artículos y ejemplos de arquitecturas que atestiguan el interés creciente en esa década por enfrentarse a los postulados homogeneizadores de la arquitectura y el urbanismo. Read More
teme: participació ciutadana
Y del proceso al plan
Los sesenta: ¿planificación o democracia?
A mediados de los años 60 y al calor de las protestas sociales que agitaban todo occidente, la planificación moderna fue sometida a una intensa discusión. Entre otros puntos críticos, la creciente tecnificación y burocratización del planeamiento de herencia racionalista empezaba a convertirse en un blindaje al servicio de quienes manejaban el instrumento e imponían unilateralmente sus criterios e intereses. Bajo esta perspectiva, el advocacy planning[1] se propuso dar lugar desde fuera de los cauces oficiales a “una democracia urbana efectiva” y con ello abrió la vía por la que la participación se incorporó a la práctica urbanística. Read More
Participación ciudadana en la construcción de la ciudad: ¿revolución o coyuntura?
Desde hace unos años se va conformando cierto interés por hacer participar a la gente en la construcción de la ciudad. Numerosas experiencias promovidas, ya sea desde la Administración municipal como desde la práctica profesional urbana y arquitectónica, así lo corroboran. Parece que nos hemos dado cuenta de que no podemos hacer ciudad sin tener en cuenta a las personas que viven en ella. Por una parte está el impacto de la arquitectura en la gente y por otra el reto de hacer posible que la gente pueda intervenir en la arquitectura y en el urbanismo. Read More
El conflicte innecessari
Explica Michael Storper que San Francisco és una ciutat molt més atractiva que Los Angeles quan s’estudia des d’una perspectiva de proximitat a l’inividu, a nivell de microanàlisi. I explica que ho és perquè els llocs de treball de San Francisco tenen molt més valor afegit que els de Los Angeles: quan s’encarreguen enquestes detallades, a San Francisco la gent defineix la seva feina com a molt més innovadora, aportadora de coneixement i intensiva que no pas a Los Angeles. Això té una traducció òbvia a la capacitat adquisitiva dels professionals i una implicació més sofisticada al valor col·lectiu de la ciutat, perquè la motivació, la satisfacció o la felicitat dels ciutadans són la clau de l’èxit de les ciutats. Read More